Esta mañana escuché en el programa de Jorge Lanata un reportaje en vivo a María Eugenia Estenssoro, la versión vernácula de Frida Kahlo.
La Estenssoro es una pinturita: una "señora bien", con inquietudes sociales, periodista, orgullosa madre soltera, que habla francés e inglés, estudió en la Sorbona y en la Universidad de Columbia...
Bueno, el papi tenía mucha plata. Era nada menos que José (Pepe) Estenssoro, el ciudadano boliviano que según dicen las malas lenguas, era el testaferro de capitales extranjeros que participó como Presidente de YPF, de la transformación de la petrolera estatal en sociedad anónima, pasando de casi 60.000 empleados a sólo 6.000, dejando el camino expedito para la privatización a manos de Repsol. (Estenssoro murió después en un dudoso accidente de aviación).
Casualmente, el único Diputado Nacional que logró colocar el lópezmurphysmo", fue el ex Director de Relaciones Institucionales de Repsol-YPF, el abogado Hugo Martini, que participó activamente en la privatización de la petrolera estatal, y según también dicen las mismas malas lenguas, fue el encargado de "adornar" a los legisladores nacionales para que aprobaran la privatización de YPF.
María Eugenia se dedicó al periodismo, a viajar, a estudiar, creó dos Fundaciones ("Equidad" y "Endeavor Argentina") acumulando una imagen atractiva para poder ingresar a la política por un atajo: primero con Cavallo, después con López Murphy y Bullrich, negociando directamente su candidatura en el segundo puesto de la lista, sin entrar en ninguna interna partidaria, ninguna votación, a pura dedocracia.
Esa fue una de las cosas que reconoció con toda sinceridad frente al gordo Lanata. Auto escindida luego de la coalición (¿o colisión?) que la llevó a ser elegida como Legisladora de la Ciudad de Buenos Aires, ahora tiene un bloque unipersonal ( ella misma) entre los numerosos bloques en que está dividida la Legislatura Porteña. También admitió que no conocía cuántos bloques hay, no supo decir cuáles eran los cinco proyectos más importantes aprobados, y reconoció que existe un divorcio absoluto ente los miembros de la Legislatura y la gente, cosa que se evidenció a partir del caso Cromagnon.
¿Ejemplo a seguir o más de lo mismo?
Susana Luro
4 comentarios:
Durante la campaña electoral, uno de los candidatos hechizó al contrario con un encantamiento de confusión, que liaba sus palabras y enajenaba su razonamiento. El público no lo notó demasiado, pero en la tele aprovecharon para editar videos cómicos con sus palabras. Para vengarse, un grupo de presión contrató un hechicero para que cambiara de color al candidato enemigo, y cuando éste se tornó negro, lanzó a su vez un grimorio de halitosis contra su adversario. Muchos electores, hartos ya, el día de las votaciones encantaron sus papeletas antes de meterlas en la urna, para que ganara quien ganase, perdiera.
Más de lo mismo...
Desde el partido de Bullrich, en el que estaba en ese momento, fui testigo de la maniobra. Eso me llevó incluso a alejarme de ese partido y de la política, por el momento al menos. Puajjjjj
Ricardo
nos vemos en todos estos espejos , en cada uno esta el parecerse o no
cordialmente,
ana
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